Estas disciplinas son conocidas por ser útiles para aprender a defendernos. Pero lo que es menos conocido son los beneficios mentales de las artes marciales. Hoy te contamos cuáles son.
¿Cuáles son los beneficios mentales de las artes marciales?
Las artes marciales son prácticas ancestrales que combinan movimientos muy precisos con técnicas de defensa personal. Pero lejos de ser todo un esfuerzo puramente físico, detrás hay una profunda disciplina mental.
Ya se trate de karate, judo o incluso kick boxing, cada estilo tiene su propio enfoque. Pero todos requieren concentración, autocontrol y perseverancia. A medida que pasa el tiempo, la práctica continua va llevando a quienes apuestan por ellas a experimentar una transformación interna. Es decir, que no solo se mejora la condición física y la técnica, sino que hay un crecimiento personal a nivel mental.
Sin embargo, es habitual que en los comienzos, sobre todo si se empieza en la edad adulta, la atención se centre en el aspecto físico. Pero lo que realmente importa son los beneficios mentales de las artes marciales. La práctica lleva a una conexión fuerte entre cuerpo y mente. Esto permite saber defenderse, pero también poder enfrentarse a los retos del día a día con mayor resiliencia.
A continuación vamos a ver los beneficios mentales de las artes marciales en detalle.
Mejora de la autoconfianza
Aprender nuevas habilidades y técnicas en las artes marciales es un logro que fortalece la autoconfianza. Aunque los progresos sean pequeños, como controlar una postura o ganar un combate, son momentos que tienen peso en la seguridad de una persona.
Esta confianza va más allá del dojo y se extiende a la vida diaria. Es decir que la autoconfianza ayuda a afrontar situaciones difíciles con una actitud positiva y la creencia de que pueden superar obstáculos.
Mayor autocontrol y disciplina
Otro de los beneficios mentales de las artes marciales es el autocontrol. Los entrenamientos requieren de calma, paciencia y disciplina, con un control emocional para mantener la serenidad. Esta última también es importante en situaciones de presión, tanto personales como profesionales. Si aprendemos a gestionar las emociones durante un combate o en una situación difícil, nuestra capacidad para tomar decisiones también se verá mejorada.
Reducción del estrés y mejora del bienestar emocional
El ejercicio físico sirve para liberar tensiones. Pero en las artes marciales, en las que hay que concentrarse, podemos desconectar de las preocupaciones diarias. Por tanto, las sesiones se convierten en una especie de meditación activa. Con la práctica regular, se reducen los niveles de ansiedad y se mejora el estado de ánimo, ya que el cuerpo libera endorfinas. Estas son las hormonas responsables de generar sensaciones de bienestar.
Aumento de la resiliencia mental
Para dominar las artes marciales, el fracaso es parte del proceso de aprendizaje. Los errores son inevitables y no siempre se ganarán todos los combates. Pero es ahí cuando se aprende y se mejora. De este modo, se cambia la forma en que se ven los fallos, que se convierten en oportunidades para crecer. La resiliencia es la capacidad para superar estos desafíos y verles el lado bueno.
Si quieres aprender artes marciales, pero además obtener estos beneficios mentales, ven a una clase de prueba en Warriors Barcelona. Tenemos clases para todos los niveles y con un método de enseñanza propio.